Dia 26

Pastor Diego Castano   -  

DÍA 26: ENSEÑA TU FE A TRAVÉS DE GENEROSIDAD

“Envía tu grano por los mares, y a su tiempo recibirás ganancias. Coloca tus inversiones en varios lugares,  porque no sabes qué riesgos podría haber más adelante.” Ecclesiastes 11:1-2 (NTV)

Dios quiere que uses tu dinero para ayudar a las personas en necesidad. Dios no te puso en esta tierra para vivir solo para ti mismo. Él te bendice para que puedas bendecir a otros. Todo esto es parte de como Dios te hace más como El.

Todo lo que tienes en la vida es debido a la generosidad de Dios. No tendrías nada, ni siquiera estarías vivo, si no fuera por la generosidad de Dios. Incluso tu habilidad para crear riquezas es un regalo de Dios. “Recuerda al Señor tu Dios, porque es él quien te da la capacidad de producir riqueza” Deuteronomio 8:18 (NVI). Dios es generoso y El quiere que seas generoso como él.

Imagina que tu padre es multimillonario y quiere compartir su fortuna contigo. Pero él sabe que necesitas ser examinado para ver si puedes administrar esa cantidad de dinero. Así que te da una cantidad fija de dinero y dice: “Quiero que aprendas a vivir con menos, puedes usar el resto para ayudar a los demás. Voy a estar vigilándote para ver cómo administras y distribuyes mis recursos. Si lo haces bien, te lo dare todo “. ¿Cómo usarias ese dinero?

Dios quiere especialmente que seas generoso con los pobres. A lo largo de la Biblia, Dios nos dice que está observando cómo ayudamos a los pobres, y si cumplimos con estas promesas tremendas. Por ejemplo: “A quien le dé a los pobres no le faltará nada, pero los que cierren sus ojos a la pobreza serán maldecidos” Proverbios 28:27 (NTV). “Si ayudas a los pobres, estás prestando dinero al Señor, ¡y él te lo pagará!” Proverbios 19:17 (NTV)

Eres bendecido para ser una bendición. Cuanto más ayudas a los demás, más te bendice Dios. Él te da para que puedas dar a los demás. ¿Por qué? ¡Porque Dios quiere que seas como El, y Dios es un dador!

Preguntas de reflexión:

¿QUÉ ESCUCHASTE?

¿Qué te dijo Dios al leer las Escrituras y la devoción de hoy?  

¿QUÉ PIENSAS?

¿Cómo se aplica a tu vida?

¿QUÉ HARÁS?  

No solo seas un oidor de la palabra, pero un hacedor de la palabra. (Santiago 1:22)

AHORA HABLA CON DIOS

Aquí es donde transformas tus pensamientos en oración. Podría ser una oración de gratitud o alabanza. Podría ser una oración de confesión o una petición de ayuda de Dios. Tu decides. Tómate un minuto para escribir una oración de respuesta a lo que Dios te dijo.