Dia 24

Pastor Diego Castano   -  

DÍA 24: DIOS ESTÁ ESPERANDO QUE PLANTES UNA SEMILLA

Ciertamente les aseguro que, si el grano de trigo no cae en tierra y muere, se queda solo. Pero, si muere, produce mucho fruto.” JUAN 12:24 (NVI)

¿Qué hace un agricultor con un campo estéril que no produce fruto? Él no se queja de eso. Él no se preocupa por eso. Ni siquiera necesita orar al respecto. Simplemente sale y planta alguna semilla. Él sabe que nada va a crecer hasta que la semilla esté en la tierra.

Todo en la vida comienza como una semilla, una vida, una relación, un negocio, incluso una iglesia. Y no pasa nada hasta que se siembra la semilla.

¿Estás esperando en Dios una ganancia inesperada? Dios dice: “Estoy esperando que plantes una semilla”. ¿Porque Dios nos obliga a plantar una semilla? Porque sembrar semilla es un acto de fe. La siembra es participar con el proceso de fructificación de Dios. Cuando siembras la semilla, tomas lo que tienes y lo regalas. Eso requiere fe! Y trae gloria a Dios.

Jesús describió este principio de siembra y cosecha, cuando explicó por qué vino a la tierra a morir en la cruz. Jesús dijo: Ciertamente les aseguro que, si el grano de trigo no cae en tierra y muere, se queda solo. Pero, si muere, produce mucho fruto.” Juan 12:24 (NVI). Jesús estaba diciendo: “Millones de personas serán salvas e irán al cielo debido a mi muerte y resurrección. Voy a plantar una semilla, y la semilla es mi vida “.

Aquí está el principio de sembrar y cosechar: lo que necesite, planta una semilla. Si necesitas más tiempo, dedica más tiempo a sus hijos. Si necesita más dinero, da más dinero a alguien que lo necesite. Si necesitas más sabiduría, comparte la sabiduría que tienes con los demás. Cualquier cosa que necesites, planta una semilla. Entregate!

Puede que no tenga sentido regalar algo de lo que necesite más, pero esa es exactamente la actitud que Dios quiere bendecir, y producirá frutos en su vida. Cuando tengas una necesidad, no te quejes, no te preocupes, ¡solo plante una semilla!

Preguntas de reflexión:

¿QUÉ ESCUCHASTE?

¿Qué te dijo Dios al leer las Escrituras y la devoción de hoy?  

¿QUÉ PIENSAS?

¿Cómo se aplica a tu vida?

¿QUÉ HARÁS?  

No solo seas un oidor de la palabra, pero un hacedor de la palabra. (Santiago 1:22)

AHORA HABLA CON DIOS

Aquí es donde transformas tus pensamientos en oración. Podría ser una oración de gratitud o alabanza. Podría ser una oración de confesión o una petición de ayuda de Dios. Tu decides. Tómate un minuto para escribir una oración de respuesta a lo que Dios te dijo.