Dia 17
PERMANECE FIEL CUANDO LOS DEMÁS DUDEN DE TI
“Todos los que están aquí reunidos sabrán que el Señor rescata a su pueblo, pero no con espada ni con lanza. ¡Esta es la batalla del Señor, y los entregará a ustedes en nuestras manos!” 1 Samuel 17:47 (NTV)
Cuando Dios te de un sueño, no te se sorprendas cuando las gente intente detenerte – a veces incluso la gente que más te quiere.
David enfrentó a cuatro gigantes antes de encontrarse con Goliat. No eran gigantes físicos, pero eran gigantes en su mente. Tu vas a enfrentar a estos gigantes tambien:
El primer gigante fue el retraso. En el caso de David, su padre lo detuvo. Incluso después de que el profeta Samuel ungiera a David como rey, Isai le dijo a David que regresara a cuidar de las ovejas! Ningún sueño se cumple al instante. Dios te da el sueño un día, pero El no lo va a cumplir al día siguiente. Pueden pasar años antes de que veas el cumplimiento del sueño de tu vida. Siempre hay un período de espera.
El segundo gigante fue el desaliento. Goliat creó un clima de terror en Israel, y todos estaban convencidos de que iban a perder la batalla. Pero David se levantó con fe y le dijo a Goliat: ¡Esta es la batalla del Señor, y los entregará a ustedes en nuestras manos! (1 Samuel 17:47). ¿A quién estás escuchando que dice que no puedes hacerlo?
El tercer gigante fue la desaprobación. El hermano de David cuestionó sus motivos y lo desaprobó por ir tras Goliath. Cuando Dios te da un sueño que los demas temen, y lo haces de todos modos, vas a ser juzgado y difamado. Tienes que decidir lo más importante para ti – la aprobación de otras personas o la aprobación de Dios.
El cuarto gigante fue la duda. No había mayor experto en guerra que el rey Saúl. Le dijo a David que estaba loco por pensar que podía pelear contra un guerrero como Goliat. Estas dudando de ti mismo porque algunos “expertos” te dicen que no puedes hacerlo, aun cuando Dios dice que si puedes?
Cuando te enfrentes a retrasos, desanimo, desaprobación y duda, espera en esta promesa: “Esta es la batalla del Señor, y los entregara a ustedes en nuestras manos (1 Samuel 17:47 NTV).
Preguntas de reflexión:
¿QUÉ ESCUCHASTE?
¿Qué te dijo Dios al leer las Escrituras y la devoción de hoy?
¿QUÉ PIENSAS?
¿Cómo se aplica a tu vida?
¿QUÉ HARÁS?
No solo seas un oidor de la palabra, pero un hacedor de la palabra. (Santiago 1:22)
AHORA HABLA CON DIOS
Aquí es donde transformas tus pensamientos en oración. Podría ser una oración de gratitud o alabanza. Podría ser una oración de confesión o una petición de ayuda de Dios. Tu decides. Tómate un minuto para escribir una oración de respuesta a lo que Dios te dijo.