Dia 12
ESPERE QUE DIOS TE AYUDE A CRECER ESPIRITUALMENTE
“Así que no nos cansemos de hacer el bien. A su debido tiempo, cosecharemos numerosas bendiciones si no nos damos por vencidos.” GALATAS 6:9(NTV)
Cuando piensas en tu caminar con Jesús, algunos días te preguntarás: “¿Por qué tarda tanto tiempo ver el progreso? Todavía estoy luchando con tantos problemas. ¿Cuándo finalmente vere cambios positivos?
El crecimiento espiritual es como el crecimiento que vemos en la naturaleza: La mejor fruta madura lentamente. Nuestro problema es que tendemos a ser impacientes; ¡Desenterramos la semilla para ver su progreso de crecimiento y eso hace mas lento el proceso! Si no estás viendo tanto crecimiento como te gustaría, no te desesperes. El crecimiento lleva tiempo. La sabiduría de Dios dice: “No nos cansemos de hacer el bien, porque en el momento oportuno cosecharemos numerosas bendiciones si no nos rendimos”.
Intenta estos pasos para el crecimiento espiritual:
- Cultiva el crecimiento con la Palabra de Dios. Cuando lees las promesas de Dios una y otra vez, construyen tu fe y renuevan tu certeza de que el fruto está por llegar, aunque no lo veas todavia: “La fe es la confianza de que en verdad sucederá lo que esperamos; es lo que nos da la certeza de las cosas que no podemos ver.” Hebreos 11:1
- Coopera con Dios en el proceso de crecimiento. Alabe a Dios por el trabajo que está haciendo en su vida, recordando que El poda las ramas que dan fruto para que produzcan aún más (Juan 15: 2 NTV).
- Ora a través de la “lista de frutos”. Medita en oración en la lista del fruto del Espíritu de Gálatas 5:22-23. El fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, gentileza y dominio propio. Pídele a Dios que produzca este fruto en tu vida. Pídale a Dios que te muestre lo que estás haciendo para impedir su crecimiento. Pídele a Dios que te ayude a cultivar hábitos saludables en tu vida.
Preguntas de reflexión:
¿QUÉ ESCUCHASTE?
¿Qué te dijo Dios al leer las Escrituras y la devoción de hoy?
¿QUÉ PIENSAS?
¿Cómo se aplica a tu vida?
¿QUÉ HARÁS?
No solo seas un oidor de la palabra, pero un hacedor de la palabra. (Santiago 1:22)
AHORA HABLA CON DIOS
Aquí es donde transformas tus pensamientos en oración. Podría ser una oración de gratitud o alabanza. Podría ser una oración de confesión o una petición de ayuda de Dios. Tu decides. Tómate un minuto para escribir una oración de respuesta a lo que Dios te dijo.