Dia 11

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CONFIA EN DIOS PARA USAR TU PROBLEMAS PARA BIEN

Fuimos oprimidos y agobiados más allá de nuestra capacidad de aguantar y hasta pensamos que no saldríamos con vida. De hecho, esperábamos morir; pero, como resultado, dejamos de confiar en nosotros mismos y aprendimos a confiar solo en Dios, quien resucita a los muertos.” 2 CORINTIOS 1:8-9 (NTV)

Ninguno de nosotros está exento del sufrimiento. Todos experimentamos soledad, crítica, desánimo y maltrato. ¿Por qué Dios permite que estas cosas sucedan en nuestro mundo? Nadie tiene una buena respuesta a esa pregunta, pero podemos hacer una pregunta diferente: ¿Qué está haciendo Dios cuando estoy sufriendo? Para empezar, Dios está haciendo las mismas cosas por nosotros que Dios hizo por Jesús en su sufrimiento. Dios redime nuestro sufrimiento y lo convierte en algo bueno.

¿Jesús sufrió? ¿Jesús estaba a veces solo? ¿Estaba tentado a desanimarse? ¿Fue malinterpretado, difamado y criticado injustamente? ¡Por supuesto! ¿Significa esto que Dios creó esas circunstancias? No. Dios es bueno y no causa mal ni hace mal. Pero cuando el mal nos asalta, Dios lo redime transformando nuestro carácter en el carácter de Cristo. Cuando permitimos que Dios camine con nosotros a través del dolor y la oscuridad de la vida, Dios nos enseña a confiar en él. Dejamos de confiar en nosotros mismos y aprendemos a confiar solo en Dios (2 Corintios 1: 8-9).

Dios también redime nuestro sufrimiento cuando nos enseña cómo ayudar a otros: nos consuela en medio de todos nuestros problemas para que podamos consolar a otros. “Él nos consuela en todas nuestras dificultades para que nosotros podamos consolar a otros. Cuando otros pasen por dificultades, podremos ofrecerles el mismo consuelo que Dios nos ha dado a nosotros.” 2 Corintios 1:4.

Y Dios redime nuestro sufrimiento a medida que fortalece nuestras relaciones con otros creyentes: “y ustedes nos están ayudando al orar por nosotros. Entonces mucha gente dará gracias porque Dios contestó bondadosamente tantas oraciones por nuestra seguridad.2 Corintios 1:11

Entonces, ¿cómo puedes esperar lo mejor de Dios cuando estás pasando por momentos difíciles?

  • En la fe, resiste el desánimo, sabiendo que Dios esta a favor de ti.
  • En la fe, cree que Dios está contigo y trabajando las cosas para tu bien.
  • En la fe, confíe en la protección y guíanza de Dios.

Preguntas de reflexión:

¿QUÉ ESCUCHASTE?

¿Qué te dijo Dios al leer las Escrituras y la devoción de hoy?  

¿QUÉ PIENSAS?

¿Cómo se aplica a tu vida?

¿QUÉ HARÁS?  

No solo seas un oidor de la palabra, pero un hacedor de la palabra. (Santiago 1:22)

AHORA HABLA CON DIOS

Aquí es donde transformas tus pensamientos en oración. Podría ser una oración de gratitud o alabanza. Podría ser una oración de confesión o una petición de ayuda de Dios. Tu decides. Tómate un minuto para escribir una oración de respuesta a lo que Dios te dijo.